domingo, 29 de noviembre de 2009

Qué pena me das



I
Verán que entre esta entrada y la anterior, pasaron 7 meses. Les quería contar qué estuve haciendo esos 7 meses.
Ahora que pienso, coincidió con el hecho de pasar a tener Internet en mi casa, independizándome de las entretenidas aunque sedentarias tardes de domingo en el ciber café.

II
Jugué a ser el “rey de los mares” y me armé un archivo Word a modo de boletín y de pequeña embarcación, como otra excusa para interactuar con los que, domingo a domingo, les mandaba la actualización de este blog. Así cambié la actualización del blog “La vida y la ciencia” por la actualización “red lvylc”.
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III
¿Qué es la “red lvylc”? Son mis contactos: los presentes, los pasados (los que me pidieron que no les llenara más la casilla con estas cosas, pero siempre con respeto) y los inocentes futuros. Son gente que hacen cosas que tienen que ver con la naturaleza, con la ciencia, con la educación, con la salud… ¡con la vida!
Estoy convencido que, a través de esta poderosa herramienta de comunicación (Internet), podemos colaborar intercambiando ideas, información y recursos; tratando de contrarrestar esa inercia de “arreglárselas solo” y de “supervivencia de los más aptos” (que tiene su “razón de ser” pero no me parece necesaria ni constructiva).
Pretende ser un puente o pequeña plataforma, a través del cuál o desde dónde poder expresar inquietudes, interrogantes, cuestiones, puntos de vista, compartir iniciativas, actividades, información y recursos, recomendaciones, y todas esas cosas que nos hacen vibrar.

IV
A mitad de 2009 me di cuenta de que era necesario crear otro blog, dirigido a los estudiantes que toman mis cursos, con entradas “cortitas y al pie”, que den testimonio de las aventuras que surgen de esos “cursoscomocaminos”. A principios de agosto de 2009 vio la luz “ciencia20”.



V
Me dio gusto ver que, a pesar de estos 7 meses sin moverlo, este blog siguió navegando solito: ya aprendió a caminar.
Y como una prueba de eso, y para manifestar mi alegría por el reencuentro desde aquí, copio y pego (así como fue escrito) el último comentario que recibió este blog (16 de noviembre de 2009) para una entrada del 22 de marzo de 2009:

tonto como que quieres eliminar a una tillandsia, investiga bien, no es una plaga y no dañan los arboles pues es una epifita. la verdad no estas haciendo un bien si no destruyendo a la naturaleza tu tambien. hay paises que las rescatan pues son muy valiosas para realizar proyecto de determinacion de metales por contaminacion atmosferica, que pena me das¡¡¡

Foto: Chinche del mburucuyá sobre una planta vecina. Archivo ciencia20